EPICTETO
Pocas cosas se saben de Epicteto (h. 55-h. 135) fuera de su condición primera de esclavo, su interés por la filosofía y que, ya libre, fundó su propia escuela en Nicomedia (Epiro). Adscrito comúnmente a la corriente filosófica estoica, que conoció su auge en torno a los siglos III a.C.-II d.C., sus enseñanzas, que sólo nos han llegado a través de los apuntes de uno de sus discípulos y otras fuentes indirectas, desprenden una sabiduría directa y clara, y tratan por lo general cuestiones prácticas que tienen como espacio natural la vida y las inquietudes personales del ser humano. Precedida de una iluminadora introducción, esta antología titulada como El arte de vivir (en tiempos difíciles) -que integra su "Manual" y una selección de sus "Disertaciones"- proporciona una recopilación significativa de su pensamiento, cuyo influjo se echa de ver en las Meditaciones de Marco Aurelio y que pivota en torno a la capacidad de la persona para elegir cómo enjuiciar las penas y alegrías que la afectan.Introducción y traducción de Ignacio Pajón Leyra
Epicteto Nacido esclavo, tComo muchos de sus contemporáneos, Epicteto buscaba una respuesta que le permitiera sobrellevar con dignidad los embates de unos tiempos tempestuosos, tan parecido a a los nuestros. No es de extrañar que él, al fin y al cabo él, un pobre liberto, comparta la misma escuela filosófica que un emperador, Marco Aurelio, que fue su alumno.