CICERÓN
Cicerón escribió en el año 44 a.C. este tratado filosófico sobre la felicidad, en el que se pregunta por relación que esta guarda con la virtud y con la sabiduría. En su siempre elegante prosa, discurre sobre diferentes actitudes filosóficas y vitales con que los hombres tratan de alcanzar la felicidad y sortear los embates de la fortuna, y caricaturiza a quienes sobrevaloran y llevan con poca dignidad las afecciones, ya sean las más groseramente corporales como las de un alma antojadiza y caprichosa. Los consejos de Cicerón encuentran en los diálogos de Platón el puerto seguro en el que la razón nos prepara, no importa lo dolorosos y trágicos que sean, para los avatares de nuestro día a día.
La figura de Marco Tulio Cicerón (106-43 a.C) constituye, sin lugar a dudas, una de las más relevantes de cuantas nos haya legado la Antigüedad clásica. Nacido en el seno de una familia perteneciente a la nobleza de Arpino, recibió una formación completa en Grecia y Roma que, combinada con su inusual capacidad oratoria y un brillante dominio del lenguaje, le llevó a ser un político republicano prominente, el más destacado abogado de su tiempo, un reputado pensador y un escritor que es el paradigma de la perfección de la lengua latina. Marco Tulio Cicerón es el escritor romano de época clásica del que mayor cantidad de escritos se han podido leer en los veinte largos siglos que han seguido a su muerte.