DE QUEVEDO, FRANCISCO
«La vida del Buscón» se sitúa en la línea de la novela picaresca, iniciada en 1554 con la publicación de la anónima «Lazarillo de Tormes». Hay que situar «El Buscón», dentro de lo que se considera segunda etapa del género picaresco. La singularidad de la obra frente a los rasgos esenciales de pertenencia al género se basa en los rasgos siguientes: El protagonista no sirve a varios amos, el final abierto de la narración o la incoherencia formal del punto de vista autobiográfico.
Francisco de Quevedo y Villegas (Madrid, 1580 - Villanueva de los Infantes, 1645) recibió
formación jesuita en el Colegio Imperial de Madrid, en la Universidad de Alcalá y empezó a estudiar Teología en la
Universidad de Valladolid. De vuelta en Madrid en 1606 se centró en la literatura y en medrar en la corte. Fueron años
prolíficos en los que, además de poemas, escribió La vida del Buscón llamado don Pablos (publicada en 1626), casi todos
los textos que formarán Los sueños (que aparecieron reunidos en 1627), el elogio hispánico España defendida y los
tiempos de ahora y el texto estoico Doctrina moral del conocimiento propio, y del desengaño de las cosas ajenas, que
será el precedente de La cuna y la sepultura (1634). Siguió escribiendo poesía invadida por el pesimismo y también
obras como Virtud militante, la Vida de Marco Bruto o La hora de todos y la Fortuna con seso.