Nuestra vida está llena de algoritmos, y no es de extrañar, pues esta palabra tan en boga se refiere a procedimientos esenciales en nuestras vidas, aunque se haya convertido, para mucha gente, en sinónimo de algo perverso. Pero aquí está Clara Grima para recordarnos por qué les debemos tanto. Con su humor marca de la casa averiguaremos cómo sus maravillosos procedimientos permiten que nuestro mundo sea como es y, sobre todo, como será. Arrancando en la antigua Grecia, con algoritmos que nos parecerán muy simples y que aún seguimos usando hoy en día en algo tan moderno como la seguridad informática, de ahí viajaremos al espacio para saber cómo hicieron posibles viajar a la Luna. De vuelta a la Tierra, conoceremos algoritmos que nos hacen más cortos los desplazamientos, y trataremos aquellos que nos regalan la música digital y las fotos para el Insta. Nos asombraremos con los algoritmos que copian las hormigas o a nuestras neuronas para encontrar las mejores soluciones a algunos problemas. La inteligencia artificial y sus dilemas serán la última parada de este alucinante paseo por el mundo de los algoritmos.
Yo soy Clara, aunque mucha gente me llama Mati, no sé por qué... A mí me gusta, no creas, aunque no sé si a mi abuela le haría mucha gracia porque llevo su nombre. Soy la mamá de Salvador y Ventura y con ellos he descubierto que se pueden contar cuentos con mates, o mates con cuentos. Me río con los chistes malos, lloro con todas las pelis y bailo de forma histriónica. Ah, también soy profe en la Universidad. Soy la andaluza.
Yo soy Raquel, y mi nombre significa ?oveja?, como las de la página 17. Dibujo desde que era pequeña y me encanta. De hecho, me pasaría el día dibujando por todas partes: papeles, suelos, muros? Si me encuentras por la calle no me des un lápiz, por si acaso. Me gustan los perros, el sushi y los cómics. A veces sueño con androides eléctricos. Soy la catalana.