SHKLOVSKI, VIKTOR
«Me has dado dos encargos: 1) No telefonearte. 2) No verte. Así que ahora soy un hombre ocupado. Hay un tercer encargo: no pensar en ti. Pero ese no me lo has confiado". El amor negado o el no amor es el punto de partida de la relación epistolar entre un hombre una mujer en el Berlín de los años 20.
Durante su exilio en la ciudad alemana, Viktor Shklovski se enamoró de Elsa Triolet (la Alia de su novela y primera mujer de Louis Aragon) quien le consintió que le escribiera cartas con la única condición de no hablarle de amor.
Zoo, o cartas de no amor es una novela epistolar nacida de una prohibición expresa. Las misivas de Shklovski están repletas de observaciones sobre la vida de entre guerras en Rusia y Alemania del círculo intelectual de emigrantes, con figuras de la talla de Roman Jakobson y Boris Pasternak, y también incluyen hermosas reflexiones sobre el arte y la literatura. Pero sobre todo, hablan de aquello de lo que no debían hablar: de amor
«Shklovski traza pinceladas brillantes en cada página.»
Michael Dirda, The Washington Post
«Shklovski revitaliza la novela epistolar.»
Choice
«Mucho más que una conmovedora evocación del dolor del exilio y del amor no correspondido (...) es también un brillante retazo de historia de la literatura.»
New Leader
«Inspirado en Sterne -incluso en los artefactos tipográficos-. Zoo es una obra que conjuga cotilleos literarios y referencia eruditas.»
Listener
«Zoo convierte el mundo industrial en una metáfora del deseo y del amor frustrado.»
Charles Simmons, New York Times
«El chico malo del formalismo ruso.»
Solomon Volkov, The New York Times
Víktor Borísovich Shklovski (1893-1984) es uno de los teóricos literarios más importantes y una figura central de la cultura rusa de la primera mitad del siglo XX. En los años previos a la revolución fue el fundador y ruidoso propagandista de la escuela formalista, con artículos como ?La resurrección de la palabra? (1914), ?Sobre poesía y lenguaje transracional? (1916) o ?El arte como procedimiento? (1917), en los que, a partir de conceptos como el de ?extrañamiento?, introducía una concepción radical del arte, alineada con las tesis de sus amigos futuristas.