YO VIVÍ EN UN HARÉN

Una pasión: el reporterismo. Un lugar: el mundo, de Kosovo a Calcuta. Un deseo: mimetizarse con el ambiente, enterarse de cuanto ocurría, apuntarlo con minuciosidad de notario y transmitirlo a sus lectores para que pudiesen vivir la aventura a través de ella. Según Cristina López Schlichting, en sus viajes como periodista «no ahorraba riesgos, no me importaba dormir en el suelo o utilizar letrinas inmundas. me era indiferente si había o no comida, si se trataba de subir montañas o bajar a las cuevas. Soy consciente de habérmela jugado cuando fui la primera periodista en entrar en la ciudad ocupada de Valona, en Albania, disfrazada de monja. De Marruecos volví con el cuerpo arado por los mordiscos del alambre bífido de la frontera. de las minas de Asturias salí molida por las agujetas. Estaba poseída por un fervor incesante, enamorada de mi profesión». Para que estos años intensos y apasionantes no se perdieran en el olvido, la autora de Yo viví en un harén ha reunido en estas páginas sus mejores trabajos. La vida en un harén, el contacto con un grupo de skinheads o las huellas de un desastre como el huracán Mitch dan forma a estas memorias de una reportera que, con el anzuelo del dolor o el de la alegría, se ha visto siempre atrapada en las redes de la realidad.

Cristina López Schlichting (1965, Madrid) es ya una consagrada periodista, una mujer con los pies en la tierra y la palabra sin tabú. A sus 40 años, Cristina dirige, desde enero de 2002, el popular y polémico programa de la Cadena COPE, bautizado «La Tarde con Cristina», un magazine que se emite a diario. Schlichting es una mujer emprendedora que se licenció en Ciencias de la Información por la UCM. Lo que empezó como becaria en ABC, siguió como Redactora Internacional en la misma casa, especializada en todos los países del telón de acero y colaborando en «Política Exterior» y «30 Días». De nuevo en ABC dirigió la Sección de Religión cubriendo el Sínodo de los Obispos sobre Europa 1999 y una vez más ejerció de reportera dominical, realizando viajes tan comprometidos como peligrosos cubriendo la información en Irán, Israel, Estados Unidos, Marruecos y Kosobo entre otros muchos destinos en crisis. Trabajó dos años más como reportera dominical, esta vez en El Mundo, y fue contertulia en «Sabor a ti», de Antena 3TV, en «La mañana de la COPE», de Luis Herrero y en «La linterna», de Federico Losantos. Colaboró una vez más con Antena 3TV («El primer café» de Isabel San Sebastián) y con la Cadena SER («Hora 25» de Carlos Llamas).