Las especialidades técnicas se enfrentan a una peculiaridad añadida, y es que en muchas de las cuestiones a desarrollar se cae en el error de amasar expresiones algebraicas de fenómenos físicos o de comportamiento de sistemas y no se enfoca el tema respecto a su fin último o a las bases fundamentales del mismo. Desde luego, Sistemas Electrónicos no es en absoluto una especialidad que escape a este riesgo. Es vital recordar que el tiempo es limitado y que los miembros del tribunal persiguen saber si el opositor sabe de qué trata el tema y no el análisis de un circuito concreto, que puede ser magistral, pero inadecuado. El análisis de un circuito o de varios ya se probará en la parte práctica. Esta prueba no es para eso y desde luego los miembros del tribunal no se detendrán en analizar circuitos electrónicos presentados por cada opositor con objeto de ver si se ha equivocado. Parece entonces más conveniente definir qué puede hacerse y apoyarse en algún dispositivo concreto (sólo ejemplificando) más que centrarse en él de forma extenuante.
José F. Demaría nació en 1953 y entró en contacto con el trabajo de su abuelo desde sus primeros años. No obstante, su vocación se decantó por la aviación militar y en 1972 ingresó en la Academia General del Aire, donde se graduó, con la XVIII promoción, como teniente de Aviación en 1976. Piloto de caza, fue destinado a las principales unidades de combate del Ejército del Aire, al que dedicó más de cuarenta años de servicio activo. Con el valor acreditado en su hoja de servicios por sus misiones sobre los Balcanes, diplomado de Estado Mayor y especializado en la adquisición de sistemas de defensa por la Air University (Ohio, Estados Unidos), con más de tres mil horas de vuelo en aviones de caza, y tras haber sido jefe de la División de Logística del programa Eurofighter en Múnich (Alemania) y director de la Academia Básica del Aire (León), alcanzó el grado de general de brigada en 2007. Casi desde el inicio de su carrera ha escrito sobre temas profesionales en revistas y publicaciones especializadas, y en 1989 obtuvo el premio Vázquez Sagastizábal por el mejor artículo publicado ese año en la Revista de Aeronáutica y Astronáutica, para la que continuó escribiendo diversos artículos. En 2007 fue nombrado jefe de la División de Planes Estratégicos y Política del Mando de la Transformación de la OTAN en Norfolk, Virginia (Estados Unidos). Calificado por James Mattis, general jefe del Mando Central estadounidense, como uno de los mejores líderes y estrategas que había encontrado a lo largo de su carrera militar, se le encomendó la dirección del proyecto Futuros Múltiples, un análisis del futuro ambiente de seguridad sobre el que los Aliados pudieran construir un entendimiento común de la naturaleza de los riesgos y amenazas para la Alianza Atlántica y su población, y fue coautor de su publicación final en 2009. En mayo de 2011, siendo general subdirector de Programas, se dispuso su pase a la reserva, lo que le permite dedicar más tiempo a profundizar en el estudio de la vida profesional y el trabajo fotoperiodístico de su abuelo José Demaría, Campúa.
