Una redada cargada de violencia, un alijo de cocaína en manos de la persona equivocada, el asalto a un chalet de lujo, un rifle que nunca debería haber sido disparado... ¿Quién puede decir con seguridad que llegará vivo al viernes? Quince años después de su época escolar, el futbolín es lo único que une a Tito y a Camilo. Tito no ha sido capaz de salir del mundo marginal en el que siempre se ha movido. Camilo, por su parte, se ha convertido en un abogado próspero, está felizmente casado y pronto va a ser padre. Una vez a la semana, los dos viejos amigos se enfrentan en una vibrante partida que les hace olvidar sus preocupaciones diarias. Pero este lunes la partida será el. inicio de una trama endiablada, repleta de casualidades y personajes que se entrecruzan, dónde, sin que lo sepan, el destino de cada uno estará en manos del otro.
Nacho Guirado (Oviedo, 1973), compagina su actividad como fisioterapeuta y osteópata con la escritura. Poco a poco ha obtenido el reconocimiento de la crítica. Su novela El beso que no di resultó finalista del premio de novela corta Cristóbal Zaragoza; fue segundo premio de novela corta Ciudad de Dueñas (Palencia) por Antes de las doce; en 2005 obtuvo el primer premio en el Certamen Internacional Alfonso Grosso de Sevilla por Retratos de familia, y también el premio de narrativa de la Diputación de Guadalajara por su novela No siempre ganan los buenos. Además, ha publicado dos novelas negras Muérete en mis ojos, escogida novela Talento Fnac, y No llegaré vivo al viernes.