Loquillo rememora cómo se convirtió en algo más que la mayor estrella de rock de nuestro país. Una joya autobiográfica que es todo un retrato generacional. Por primera vez reunidos en un solo volumen, los libros Barcelona ciudad (2010), En las calles de Madrid (2018) y Chanel, cocaína y Dom Pérignon (2019) ayudan a comprender cómo el joven José María Sanz llegó a convertirse en Loquillo, una rara avis en el escenario cultural y musical español desde los setenta, del que fue y es tanto testigo extraordinario como personaje central hasta la fecha. Nosotros que estamos siempre alerta marcamos la diferencia sin haceros reverencias. Vivimos, caminamos sin aliados, amamos como soñamos, soñamos siempre armados. «Memoria de jóvenes airados» José María Sanz
José María Sanz, Loquillo, nació el 21 de diciembre de 1960 en el barrio del Clot de Barcelona. Leyenda viva del rock and roll y auténtico hombre del Renacimiento, ha publicado 29 discos, de los que lleva vendidos más de dos millones de ejemplares. Colaborador habitual en medios escritos -empezó escribiendo en las míticas Popular 1 y Star-, sus artículos aparecen regularmente en la prensa nacional, así como en Rolling Stone. Actualmente tiene un blog en el diario El Mundo. Comprometido siempre con la memoria y la palabra, ha producido el documental Mujeres en pie de guerra. Asimismo, ha puesto su voz a los grandes poetas en lengua española como Octavio Paz, Pedro Salinas o Jaime Gil de Biedma y ha dedicado un disco íntegramente a la poesía de Luis Alberto de Cuenca. Ha coqueteado con el séptimo arte de la mano de Mario Camus en La ciudad de los prodigios y de Helena Taberna en La buena nueva. A su primer libro, El chico de la bomba (2002), éxito de ventas y crítica, ha seguido Barcelona ciudad (2010), ambos publicados por Ediciones B.