INTRODUCCIÓN
PRIMERA PARTE
Exposición y análisis de tres casos
Caso 1
Análisis del caso 1
Caso 2
Análisis del caso 2
Caso 3
Análisis del caso 3
SEGUNDA PARTE
Elaboración de los tres casos
1. Elementos comunes
2. Significación de la muerte
3. Vínculos familiares: lo premitivo que permite
4. La empresa familiar: alianza de los hijos varones y exclusión de la mujer
Epílogo
Bibliografía
Mediación en empresas familiares es un minucioso análisis de los vínculos y la subjetividad de los integrantes de las empresas familiares realizado a partir de la exposición de tres casos concretos. Osvaldo D. Ortemberg, un reconocido y prestigioso mediador en el ámbito de la empresa familiar, no se limita tan sólo a tratar los conflictos que hacen necesaria la ayuda del mediador, sino que expone también el largo proceso a través del cual los integrantes de los mismos llegan a un punto de fractura. Dicho proceso se remonta mucho más allá de la historia particular de cada caso, ya que en todos ellos actúan tendencias ancestrales y primitivas comunes a todos los humanos. Para Ortemberg, el conocimiento de todo ese componente histórico y prehistórico que afecta a los miembros de una empresa familiar es condición esencial para intervenir con eficacia en el conflicto. Esta obra está concebida y escrita no sólo para enseñar al mediador a abordar los problemas más comunes que suelen generarse en las empresas familiares. también está dirigida a los integrantes de las mismas. A éstos les permitirá detectar de dónde provienen los choques y exigencias con otros integrantes, cómo desentrañar los misterios de las alianzas entre ellos y contra ellos (en las que tiene una notable incidencia el ser hombre y el ser mujer), cómo se pueden reorientar esos conflictos y relativizar así la contundencia emocional con que suelen ser vividos y actuados, un comportamiento que suele poner en riesgo la empresa y los intereses de quienes la integran. Pero, sobre todo, estamos ante un libro que promueve, desde su lectura, la intervención del lector: Pretendo introducir al lector en la ignorancia, ya que ambiciono generarle preguntas [...] nos dice Ortemberg. [...] Pienso que el mediador de familia debe tener ese objetivo: no el de alguien que está cómodo en lo que sabe, sino el de quien está dispuesto a dejarse sorprender por lo que no sabe y al que cada caso le abre un nuevo pensamiento, una nueva incógnita. Ése es el mediador al que el cliente, aunque llegue a enojarse en algún momento, habrá de volver ante una nueva crisis que el devenir de su vida, su familia o su empresa le plantee.
