Un enfermero de emergencias lucha diariamente por llegar a tiempo. Cuando el ritmo cardiaco decae, los segundos marcan la fina línea entre la vida y la muerte.
Este es el testimonio de alguien que nació con la vocación de salvar vidas, de enfrentarse a las tragedias que algunos solo contemplan a través de la crónica de sucesos, de hablar de tú a tú con víctimas de malos tratos, suicidas al borde de la cornisa, familiares angustiados. Pero que también contempla de cerca pequeños milagros, y que ha incorporado a su rutina momentos que otros no olvidarán jamás.
Jorge Prieto lleva años escribiendo sobre el día a día en su turno de urgencias. Un libro que transita al ritmo frenético de las ambulancias entre historias emocionantes, humanas, inspiradoras e impactantes, que nos hace reflexionar sobre el alma humana, y que no deja de ser un homenaje a todos aquellos con quienes Jorge comparte su vocación y trabajo.
Jorge Prieto González se licenció en Criminología y Enfermería. En la actualidad es enfermero del dispositivo de urgencias madrileño Summa 112, profesor en la Escuela Nacional de Policía y voluntario en el SAMUR. Con dieciocho años sufrió el primero de cuatro neumotórax en tres meses; desde entonces se interesó por el servicio de emergencias y lo convirtió en su trabajo. Durante la campaña de vacunación contra el COVID-19 en el Wanda Metropolitano, su monólogo para amenizar la espera de los centenares de personas que guardaban turno para recibir el ansiado pinchazo lo convirtió en un fenómeno viral.
