1. **Investigación de crímenes en Avilés**
Descubra cómo un equipo policial se enfrenta a misteriosos suicidios en la ciudad asturiana.
2. **Detectives asturianos en acción**
Sumérgete en una emocionante historia de suspense protagonizada por Deva Prendes y su equipo.
3. **Rituales macabros en Avilés**
Adéntrate en un oscuro caso que desafía la lógica y revela secretos impactantes en la plaza de España.
4. **Misterio y suspense en Asturias**
Acompaña a los protagonistas en una frenética carrera contra el tiempo para resolver un enigma mortal.
5. **Trama policial en la ciudad costera**
Descubre cómo un grupo de investigadores se enfrenta a la intriga y la violencia en Avilés.
6. **Desapariciones y crímenes en la villa marinera**
Prepárate para adentrarte en un mundo de intrigas y peligros en la apacible ciudad asturiana de Avilés.
La primavera acaba de llegar a Avilés con la promesa de temperatura suaves y quizá algún día que otro en el que tormentas, lluvias incesantes y el fino orbayu que cala hasta los huesos den tregua a los habitantes de la ciudad asturiana.
Algunos ya se han lanzado a la calle este viernes, 22 de marzo, para disfrutar de la tarde que precede al merecido descanso del fin de semana. Los miembros del grupo Judicial de la Policía Nacional han retrasado el momento de irse a casa para celebrar los cincuenta y dos años de Deva Prendes, su jefa.
En la comisaría están Juanjo, casi de su misma edad, al que le une no solo el trabajo de décadas, sino una amistad que los ha convertido en confidentes de sus miserias personales; Sergio, cariñoso, resolutivo y pasional, padre primerizo deseoso de ver a su diablillo, y Sandra, la más joven, una mujer enérgica que irradia empatía y que ya visualiza las olas que el mar le promete en la cercana Salinas el sábado por la mañana.
Casi no han podido ni brindar a la salud de su querida jefa cuando reciben una llamada que truncará sus proyectos y no solo durante el fin de semana: en la plaza de España, epicentro de Avilés, una joven acaba de cometer un suicidio macabro, sangriento, que parece más un ritual satánico orquestado por un siniestro director de escena que un suicidio en sí. ¿Qué o quién la ha llevado hasta el límite?
Deva y su equipo habrán de dar respuesta a esta pregunta, y a contrarreloj, pues Paula Montero Díez, desaparecida hace cuatro años, es la primera, pero no la última víctima.
Ana Covadonga Castro estudió Psicología para acercarse a la mente humana, algo que ahora plasma en sus novelas, que exploran los límites entre el bien y el mal y los lugares más oscuros del alma. Su otra vocación, la profesión de policía, no tardó mucho más en establecerse en su currículum. Empezó aprobando las oposiciones de Escala Básica para superar después las de Ejecutiva, lo que le ha permitido convertirse en inspectora. Ahora combina la profesión de su vida con su pasión por las letras y la maternidad. El feminismo, una de sus convecciones más firmes, salpica también sus libros con la defensa de la conciliación familiar y la denuncia de las violencias que sufren las mujeres.
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