La trayectoria y la obra de Henry Giroux son de sobra conocidas por un amplio público intresado en la pedagogía crítica, la resistencia de los intelectuales y la conformación de una nueva sociedad. Sin embargo, el autor no deja de sorprendernos al introducirse tan sabiamente en la complejidad de los estudios culturales, en la disminución de los espacios públicos y la exaltación de la vida privada, en las infinitas trampas del capitalismo y en la necesidad de vincular pedagogía y política. Este libro, lleno de sugerencias y sutilezas, recoge un racimo de estudios críticos que analizan detalladamente los conflictos de clase, raza y género, en un contexto donde la acción cultural y la intervención pedagógica tienen un lugar privilegiado. Pero además Giroux se enfrenta a los discursos de cero tolerancia donde se articulan las políticas de derecha que apoyan la educación autoritaria, el complejo cárcelindustria como la solución a los problemas sociales y el castigo punitivo para el mal comportamiento juvenil. Y todo ello en un contexto no solamente crítico sino también alternativo. La historia actual no es el fin de la historia ni el capitalismo es un hecho fatal e inconmovible. Hay esperanza, una esperanza educada o comedida, como a Giroux le gusta adjetivarla. Pero hay que establecer con claridad los lugares del combate, los métodos y los nuevos instrumentos que tenemos a nuestro alcance.
