El príncipe Zaleski es un aristócrata ruso exiliado por misteriososmotivos en una mansión abandonada en tierras británicas. Resuelveintrincados misterios sin levantarse de su otomana, envuelto en unanube de hachís, custodiado por su descomunal criado, el negro Ham.Decadente y romántico, dotado de una extraña erudición, Zaleski es eldetective que habrían creado Gautier, Wilde o Valle-Inclán si sehubieran visto llamados por el género policial. Salió de la pluma deM. P. Shiel (1865-1947), escritor heterogéneo e inclasificable, primer rey de la mítica isla de Redonda y asiduo a los terrenos del relatofantástico y la ficción científica.
Matthew Phipps Shiel (1865-1947) fue un prolífico escritor británico y uno de los máximos exponentes de la literatura fantástica. Nacido en la isla de Montserrat, en las Indias Occidentales, se trasladó a Inglaterra en 1885, donde ejerció de profesor y traductor antes de dedicarse a escribir relatos, publicados por The Strand y otras revistas. En sus primeras obras, El príncipe Zaleski (1895) y Shapes in the Fire (1896), se aprecia una clara influencia de Edgar Allan Poe, y en trabajos posteriores, como en The Yellow Danger (1898), también se hallan reminiscencias de H.G. Wells y Jack London. En nuestro país, la mejor muestra de su narrativa breve se encuentra en el volumen antológico La mujer de Huguenin (Reino de Redonda, 2000). La nube púrpura, escrita a modo de folletín en 1901 y publicada en seis entregas por The Royal Magazine de Londres, de inmediato llamó la atención del mundo literario inglés y cosechó grandes alabanzas de muchos escritores contemporáneos. En 1929, Shiel revisó la novela para una nueva edición de sus obras y, en paralelo a la campaña de promoción, empezó a desarrollar la leyenda del Reino de Redonda. El autor, que decía haber sido coronado en 1880 primer rey de Redonda (una minúscula y deshabitada isla antillana) con el nombre de Felipe I, dio así lugar a una curiosa dinastía literaria que aún continúa.