Ardiente defensora de los derechos de la mujer, además de intrépida arqueóloga, Amelia Peabody se suma a las protestas ante el parlamento londinense para exigir el sufragio universal. En medio de la confusión una banda logra sustraer las antigüedades egipcias que allí se guardan. Amelia ve detrás la mano de Sethos, maestro de ladrones. Poco tiempo después alguien intenta secuestrarla. Para huir de este y otros peligros, Emerson, su marido, convence a la familia de iniciar su temporada de excavaciones en Egipto. Amelia prevé un invierno aburrido pero el destino o los dioses egipcios tienen otros planes. Mientras tanto su hijo Ramsés, su pupila Nefret y David, amigo de la familia, deciden buscar por su cuenta y riesgo un valiosísimo papiro de El libro de los muertos. Pero alguien más lo quiere. Alguien que, para conseguirlo, no escatimará los medios, incluido el asesinato.
