El punto de partida de estos trabajos es que la política y el proceso democrático trascienden la idea de ciudadanía entendida como participación electoral y se expanden hacia la sociedad civil para crear un escenario político distinto al de los partidos y las elecciones. El asociacionismo y su impacto en la transformación de la sociedad civil no es novedoso, pues se ha estado discutiendo durante las últimas tres décadas, pero su formalización como segundo nivel o circuito de la política sí lo es. El análisis de dicha formalización es el objetivo de estas investigaciones, Por un lado, se discute una propuesta para financiar a las asociaciones con fondos públicos asignados por los propios ciudadanos, no por el Estado a cambio de su regulación democrática. Por el otro, se busca dar consistencia teórica al segundo nivel de la política y proponer una imagen para pensar la relación entre la ciudadanía primaria o electoral y la ciudadanía secundaria o asociacionista. La conclusión es que la política comienza a parecerse cada vez más a un archipiélago de circuitos, uno que aquí hemos denominado «postliberal» porque excede los parámetros de la política tal y como fue pensada por el liberalismo democrático clásico.