Es tentador afirmar que la pobreza es una enfermedad de las sociedades contemporáneas. Su carácter crónico y devastador, la dificultad para extirparla, los crueles daños que causa: todo justifica la metáfora. En las últimas décadas, con gran ingenio y precisión, Esther Duflo ha llevado esta analogía a un plano distinto, pues ha sabido adaptar la lógica de la experimentación médica al combate a la miseria, primero para entender cómo funciona y luego para plantear remedios. En este volumen analiza de entrada el debate entre quienes apuestan todo a la ayuda internacional y quienes, con cierto cinismo, prefieren creer que el mercado resolverá por sí solo este mal, y luego explora cuatro zonas delicadas que afectan a los más necesitados: la educación y sus promesas, la salud y sus costos, las microfinanzas y sus mitos, la corrupción y su lógica. Para la segunda mujer merecedora del Premio Nobel de Economía, esta disciplina debe ser rigurosa, imparcial y seria, una ciencia humana que actúe con generosidad, ambición y compromiso. Estas páginas son una visita guiada al cada vez más grande laboratorio de las evaluac
Esther Duflo (París, 1972) es catedrática (cátedra Abdul Latif Jameel para el desarrollo y la lucha contra la pobreza) en la facultad de Economía del MIT. Estudió en la École Normale Supérieure de París y en el MIT. Es cofundadora y codirectora del J-PAL, laboratorio de acción contra la pobreza. Fue incluida entre los ocho mejores economistas jóvenes por _e Economist, entre los cien pensadores más influyentes del mundo por Foreign Policy, y entre los «cuarenta líderes empresariales menores de cuarenta» más destacados de 2010 por la revista Fortune. Ha recibido numerosos premios y galardones, incluidos la Medalla John Bates Clark de 2010 al mejor economista estadounidense menor de 40 años, un premio «genius» de la Fundación MacArthur en 2009, el Premio Princesa de Asturias de Ciencias Sociales en 2015 y el Premio Nobel de Economía en 2019, junto con Abhijit V. Banerjee y Michael Kremer.