GUILLÉN, JORGE
Además de la historia de una amistad, esta amplia correspondencia inédita cuidada y anotada rigurosa y ampliamente por Laura Dolfi ofrece importantes datos sobre la obra de Guillén que el mismo poeta comenta indirectamente contestando a las preguntas que el crítico italiano le dirige mientras está redactando su imponente estudio sobre Aire nuestro. Alusiones y comentarios más personales (el exilio voluntario a Estados Unidos, las estancias con sus hijos, las personas conocidas, los viajes a Europa, los recuerdos de un pasado ya irrecuperable, etc.) se mezclan con una detallada reflexión sobre el significado de unos versos o sobre un debate cultural más general. Las referencias a la respetuosa polémica herreriana entre Blecuay Macrí, los comentarios de Castellet, Biedma y Valente sobre la poesía guilleniana, las alusiones a los numerosos amigos comunes (los poetas del 27 0 los colegas españoles y extranjeros) son sólo algunos de los muchos temas presentes en estas cartas que, al sucederse con un ritmo constante durante treinta años nos permiten tatnbién seguir de cerca la intensa actividad de Guillén sus conferencias, premios, viajes y fijar la fecha de composición de algunos poemas. Además, a la gran amistad con Oreste Macrí se liga la vasta red de relaciones (atentamente enfocada en el estudio preliminar) que Guillén estableció con el grupo de poetas y críticos herméticos que solían reunirse en el Gafé Paszkowski de Florencia. Durante sus largas ausencias fue, entonces, sólo la escritura epistolar la que permitió la prosecución de ese diálogo cultural y amistoso filtrado por una constante y mutua añoranza.
Jorge Guillén nació en 1893 en Valladolid y creció en el seno de una familia liberal. Cursó el bachillerato en Suiza y la carrera de letras en las universidades de Madrid y Granada. Vivió entre 1917 y 1923 en París, donde conoció a Paul Valéry, quien influyó de manera decisiva en su poesía y en su concepción estética general. Lector en Oxford y catedrático en Murcia y Sevilla, la guerra civil le llevó a un prolongado exilio en Estados Unidos, donde impartió clases en el Wellesley College y en la Universidad de Harvard. Al regresar del exilio, y una vez terminada la dictadura, recibió el Premio Cervantes en 1976 y fue nombrado miembro de honor de la Real Academia Española en 1978. Falleció en Málaga en 1984. Tusquets Editores ha publicado su prosa completa, titulada Obra en prosa, y su Correspondencia (1923-1951) con el también poeta Pedro Salinas, a quien le unió una profunda amistad.