MOOJI
En mitad del caos y de las infinitas ocupaciones que llenan nuestros días, muchos de nosotros buscamos un sentido a la existencia; la plenitud, y también una sensación genuina de quiénes somos en realidad más allá de nuestro ego y de los condicionamientos que sufrimos.
Una invitación a la libertad es una guía hacia el auténtico e inmediato despertar que tantas personas buscan, la constatación de tu verdadera naturaleza como pura y espontánea conciencia. Las sencillas pero profundas instrucciones de este libro, las preguntas y las contemplaciones que contiene te llevarán directamente al corazón de la verdad y de la libertad absoluta. Este podría ser el mayor descubrimiento que hagas en toda tu vida.
Anthony Paul Moo-Young nació el 29 de enero de 1954 en Port Antonio, Jamaica. En 1969 se trasladó al Reino Unido. Durante muchos años trabajó en el West End londinense realizando retratos, luego como pintor y fabricante de vitrales, y al final como profesor en Brixton College. En 1987, un inesperado encuentro con un jóven místico cristiano cambió su vida. La oración le condujo a la experiencia directa de lo divino. En un corto período experimentó un cambio de conciencia tan profundo y radical que resultaba irreconocible para sus amigos. A finales de Noviembre 1993 viajó a Indira Nagar, en Lucknow, para encontrarse con Papaji. Fue una experiencia propicia y profundamente significativa en su camino espiritual. Sentía que la fortuna le había sonreído: había conocido a un Buda vivo, un Maestro completamente iluminado. En 1994, después de recibir las bendiciones de su maestro, viajó a Sri Ramanashramam en Tiruvannamalai. Este es el ashram junto a Arunachala, la colina de fuego, donde Sri Ramana Maharshi*, el gurú de Papaji había vivido y enseñado. Allí Mooji se sentía muy feliz y como en casa. En 1997 mantuvo su última reunión con su querido Maestro, que ahora estaba enfermo y torpe en sus movimientos, pero cuya luz interna y presencia seguían sin disminuir. Al mes de regresar a Londres, Mooji recibió la noticia de que su Maestro había fallecido y declaró: Este principio que se manifiesta como el Maestro está siempre AQUI y AHORA. El verdadero Maestro nunca muere, es el cuerpo el que muere*. Sólo el Maestro es auténtico, ese Sat Gurú* interno.