Segunda parte de Fantasía para otra ocasión e inédita hasta ahora en castellano, Normance -con la que se completa la publicación en castellano de la narrativa de Céline- recrea el espectacular bombardeo que asoló la ciudad de París durante la noche del 21 al 22 de abril de 1944, que ninguno de los presentes podría olvidar jamás. Entre ellos, el controvertido escritor Louis-Ferdinand Céline, quien, desde las ventanas de su casa, fue testigo de las explosiones que acabaron con edificios y barrios enteros, de la baraúnda de los aviones y de los gritos de sus vecinos que hicieron de aquellas horas un seguro apocalipsis. Dueño, más que nunca, de su poderosa voz narrativa -que le ha situado, con todo derecho, entre los grandes revolucionarios de la literatura de este siglo-, Céline convoca en estas páginas trepidantes el terror de esa noche fatal, la asfixia de un espacio que ha devenido inhabitable, el espanto y el pavor de los que huyen y la desesperación de los resignados.
(Courbevoie, 1894 - París, 1961) es uno de los escritores más influyentes del siglo XX, a pesar
de ser una figura polémica en su país. Su primera novela, Viaje al fin de la noche (1932) ya lo consagró como un
gigante de las letras. Durante la Segunda Guerra Mundial se alineó con el gobierno colaboracionista de Vichy, lo que le
obligó a exiliarse al acabar la contienda. Condenado a muerte, fue indultado pero tuvo que pasar algún tiempo en
prisión. Del resto de su producción literaria destacan las novelas Guignol's Band (1943), De un castillo a otro (1957),
Norte (1960) y Rigodón (1969).