EMIL CIORAN / CIORAN, EMIL
Emil Cioran nos invita a reflexionar en este ensayo sobre la ineptitud humana para la felicidad y nuestra incapacidad para soportarla. El relato bíblico del Génesis dejó las cosas claras desde el principio: al desobedecer el mandato divino, al preferir la sabiduría a la inmortalidad, sellamos nuestro destino como seres errantes, en busca de un Paraíso perdido al que, de todas formas no podríamos adaptarnos si alguna vez diéramos con él. A lo largo de estas páginas, el célebre ensayista rumano se pregunta si la inocencia es el estado natural del ser humano, y el dolor, condición de la sabiduría. La respuesta, paradójica, sorprendente, es una muestra más del sarcasmo y la lucidez extrema de este maestro del pensamiento.
Emil Cioran (Rasinari, Rumanía 1911 - París, 1995) fue hijo de un sacerdote ortodoxo rumano. Al terminar sus estudios de Filosofía en la Universidad de Bucarest escribió una tesis sobre Bergson. De esta época data su amistad con Ionesco y Eliade. Estudió las obras de Kant, Schopenhauer, Nietzsche, recibiendo la influencia principalmente de estos dos últimos. Viajó a Alemania y fue por breve tiempo profesor de filosofía en Brasov. En 1937 recibió una beca del Instituto Francés de Bucarest que le permitió establecerse en París, donde permaneció hasta su muerte.