Verity Banks es una persona excepcional. No sólo es la única mujer que pertenece a la elite mundial de los banqueros, sino que ha logrado que su mundo sea un refugio seguro donde todo esté previsto. La aparición de Zoltan Tor, genio de las finanzas y la informática, dará al traste con su estabilidad. En el intento de demostrar que los sistemas de seguridad de los bancos son muy vulnerables, Verity se verá obligada a arriesgar su tranquilidad a cambio de la pasión que le ofrece lo desconocido. Y cuando se dé cuenta de que su vida está en peligro, ya será demasiado tarde para echarse atrás.
Katherine Neville nació el 4 de abril de 1945 en Estados Unidos. Es bachelor en Administración de Empresas y en Literatura. Ha estudiado Filosofía Antigua y realizado un Máster en literatura negra de Europa, África y América. Experta en informática, ha sido durante años vicepresidenta del Bank of America. Ha trabajado en los campos del transporte y la energía, y ha ejercido como fotógrafa comercial y modelo. Empezó a escribir a los cuatro años, y continuó con historias cortas durante la infancia hasta llegar a los poemas de adolescencia. Actualmente vive en Radford (Virginia).
Su obra
Hace años Neville decidió pasarse a la narrativa, y debió ser cierto espíritu de la época el que le hizo conectar con un tipo de novela que ya empieza a ser una moda, y que mezcla en sabias dosis género histórico, referencias culturales, elementos más o menos esotéricos y algo de misticismo e intriga.
Sus novelas suelen tratar de temas históricos aunque podríamos decir que también adquieren un cariz más místico y espiritual.
Opinión del autor
"En la seguridad financiera hay muchos agujeros."
"Escribir es una profesión muy esquizofrénica."
"No escribo por dinero."
"En la cultura española hay una vena muy mística."
"Lo que ocurrió entonces está fructificando ahora."
"Me gusta recoger la técnica de otros autores, pero no tramas ni personajes."
"Más que la cantidad de lectores me interesa la comprensión de mi obra."
"Escribo porque tengo algo que decir. Me sorprenden los escritores que dicen que no escriben para la gente sino para ellos mismos. Me pregunto por qué los publican entonces."