ZAMARRO, CORONA
El texto de este libro fue surgiendo casi solo, durante años, en los paseos
de una abuela, maestra, enamorada de su ciudad, y un nieto encantado de
escuchar cuentos. Y eso eran, historias como cuentos, para que el niño supiera
que existe un pasado muy antiguo y aprendiera a amarlo. Y para que
disfrutara al pasar ante los monumentos comprendiendo lo que significan,
que esas piedras llevan ahí cientos de años, a veces miles, y no son como
otros edificios que encontramos al pasar, que esos monumentos merecen
una mirada especial, admirada y agradecida a nuestros antepasados.
Es una forma de acercarse a unos conocimientos elementales al alcance
de cualquier persona, y quizá una motivación para profundizar después en
ellos. Es también una visión general de Málaga para gente de paso, o que
no tiene tiempo o costumbre de leer libros de Historia.
El lenguaje es sencillo, con diálogos espontáneos, humor y ternura.
Las fotografías actuales están tomadas desde el mismo lugar de los grabados
antiguos, siempre que ha sido posible. Además de ilustrar los capítulos
del libro, muestran el paso del tiempo de una forma intuitiva y amena. Muchos
adultos disfrutarán comparándolos, descubriendo quizá una Málaga
que no conocían.