LÓPEZ CALERA, NICOLÁS MARÍA / N ESTUDIO GRÁFICO (Ilustración)
Más allá de teorizaciones el dato incuestionable es que la llamada "maldita trinidad" (Banco Mundial, Fondo Monetario Internacional y Organización Mundial del Comercio) manda mucho y de mala manera, por mucho que se quieran valorar positivamente sus intervenciones para un buen orden económico internacional. Se debe reconocer el protagonismo y la hegemonía de los sujetos colectivos en el orden interno e internacional. Son entidades que no sólo mandan mucho, sino que tienen escasa legitimidad y casi nulo control jurídico. Como provocación retórica, no alejada de la realidad, se les llama aquí Leviatanes, porque son como bestias feroces e insaciables y con poderes legibus soluti. Estamos en manos de sujetos colectivos que no tienen rostro, sino siglas. Hay problemas especialmente graves cuando se trata de sujetos colectivos no reconocidos por un orden jurídico nacional o internacional. Las naciones sin Estado son quizás el caso más grave