En La ciudad de cristal, Daniel Quinn, escritor de literatura policíaca, recibe una llamada telefónica de un desconocido que lo toma por un detective y le encarga un caso. En Fantasmas, un detective privado y el hombre al que debe vigilar juegan al escondite en un claustrofóbico universo urbano. En La habitación cerrada el protagonista debe confrontar los recuerdos de un amigo de la infancia cuando recibe la noticia de su desaparición.
Es escritor, traductor y cineasta. Es autor de los libros Jugada de presión (1982), escrito bajo el pseudónimo Paul Benjamin
Desde el principio de la primera novela, Auster nos hace participar en la construcción de un puzzle en el que no todas las piezas encajan. No todo es lo que parece. Los personajes se intercambian, se mezclan tomando nuevas identidades. En este juego, el lector toma un papel activo, relevante. Su mente se entrega a este juego cuyo final no está claramente definido.
¿Es así el proceso creador del autor, el proceso del escritor-detective frente a la investigación-creación literaria?
Como a los clásicos... siempre hay que volver a Paul Auster.
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Desde el principio de la primera novela, Auster nos hace participar en la construcción de un puzzle en el que no todas las piezas encajan. No todo es lo que parece. Los personajes se intercambian, se mezclan tomando nuevas identidades. En este juego, el lector toma un papel activo, relevante. Su mente se entrega a este juego cuyo final no está claramente definido.
¿Es así el proceso creador del autor, el proceso del escritor-detective frente a la investigación-creación literaria?
Como a los clásicos... siempre hay que volver a Paul Auster.