A las 11.15 h. del tres de septiembre de 1939, el primer ministro británico, Neville Chamberlain, se dirigió por radio a la nación para anunciar que estaban en guerra con Alemania. De inmediato comenzaron a sonar las sirenas. Winston Churchill y su esposa no sólo presenciaron este acontecimiento, sino que serían de los primeros en prepararse para entrar en un refugio antiaéreo... Testigo de excepción, Churchill primer ministro británico durante los períodos 19401945 y 19511955 describe el transcurso de la segunda guerra mundial y los principales episodios que en ella acontecieron, desde la profundidad e inteligencia de su análisis y la intensidad de su vivencia, legando un testimonio directo sin parangón con ningún otro de sus protagonistas coetáneos: Hitler, Stalin o Roosevelt. El camino hacia el desastre desde el tratado de Versalles hasta que Hitler conquista Polonia, la guerra ficticia que acabó con la invasión alemana de Escandinavia, la caída de Francia y la batalla de Gran Bretaña, el bombardeo de Londres, la lucha en el desierto... son algunas de las cuestiones tratadas en este primer volumen de los dos que componen sus Memorias de la Segunda Guerra Mundial. Churchill resumió con estas palabras el espíritu moral de esta obra, que consagra su carrera literaria y le valió para obtener el premio Nobel en 1953: En la guerra: determinación en la derrota: resistencia. en la victoria: magnanimidad. en la paz: conciliación. Un extraordinario documento, considerado una obra maestra de la literatura del siglo XX, que transciende cualquier género para constituir un clásico de la política, la diplomacia y la estrategia militar.
Winston Leonard Spencer Churchill (Blenheim Castle, Oxfordshire, 1874-Londres, 1965). Proveniente de una familia aristocrática victoriana se graduó en el Royal Military College. Tras haber servido en la India presenció la guerra anglobóer como corresponsal de guerra del periódico Morning Post. En 1900 fue elegido diputado por el Partido Conservador, que abandonó en 1904 para unirse al Partido Liberal. Ocupó, entre otros, los cargos de ministro de Comercio(1908), ministro de Interior (1911) o ministro de Hacienda (1924). El gran salto en su carrera política se produce en 1940, cuando es elegido primer ministro, en sustitución de Neville Chamberlain. Después de perder las elecciones en 1945 contra los laboristas recuperó la jefatura del gobierno durante el período comprendido entre 1951-1955. Tras dimitir ese año se dedicó a la pintura y la literatura, campo en el que destacó con obras como "Paso a paso: del crepúsculo de la paz al resplandor de la victoria"; "Sangre, sudor y lágrimas"; "Los secretos de la guerra"; "Pensamientos y aventuras" o "Savrola". En 1953 se le otorgó el premio Nobel de Literatura.