Para muchos publicistas, retóricos, artistas y otras mentes pensantes, la creatividad nace de la asociación insólita entre dos entes que proceden de contextos ajenos pero que comparten alguna cualidad física o abstracta. Eso es precisamente lo que hace Juan Vidaurre en su breve pero exquisito muestrario de ideasobjetos. Metáforas. Siguiendo la estela de la obra poéticovisual de Joan Brossa y de su alumno más aventajado, el fotógrafo madrileño Chema Madoz, Vidaurre pervierte y transforma los objetos, los yuxtapone, los configura a su antojo pero siempre bajo un mismo esquema: la unión de dos elementos para transmitir una idea que ninguno de los elementos por separado contiene. 1+1igual a3. He aquí la fórmula mágica del acto creativo. Es esta imposibilidad lógica la que provoca en el lector un efecto inefable, una impresión a la vez lírica e intelectual que desconcierta y atrae como lo haría un número de ilusionismo. No es del todo casual que Brossa fuera mago además de poeta. Y de hecho Vidaurre demuestra ser, en cierto modo, un prestidigitador de las ideas. Consciente de ello, sitúa los objetos en fondos neutros, arrancándolos de su contexto original para ceñirse al concepto. Pero Vidaurre decide hacer lo que nunca haría ningún mago, esto es, desvelar sus secretos: al lado de cada obra aparece por escrito la idea que ésta pretende comunicar. ¿No hubiera sido mucho más sugerente dejar que la imagen hablara por sí sola? A pesar de ello, el abrumador ingenio que el autor demuestra en sus metáforas visuales permanece incuestionable.