Max, autor y protagonista de esta novela, tiene veintinueve años y un talento especial para dormir (eso sí, de día, pues por las noches no puede pegar ojo). Fumador empedernido, zampabollos y gandul sin complejos, en sus ensoñaciones contacta con un mundo paralelo: el Mundo, donde la magia es una práctica normal y corriente. De repente dejará de ser un inadaptado social para convertirse en el inigualable sir Max. Como miembro del Departamento del Orden Absoluto, formado por una especie de agentes secretos hechiceros, participará en la resolución de diversos casos, a cual más extravagante e inverosímil, y conocerá los vericuetos de ese universo extraño y desquciado. En el país de antigua y prestigiosa tradición literaria que es Rusia, las novelas de Max Frei son desde 1996 un verdadero fenómeno: han recibido la unánime alabanza de la crítica y causado fervor entre el público amplísimo y variopinto, pues permiten varios niveles de lectura: la fantasía y la novela negra están unidas por un agudísimo humor, con chistes que resucitarían a un muerto. Asimismo, abundan los guiños y referencias en un juego pícaro, inteligente y desenfadado que despierta la complicidad y entrega del lector.