El naufragio de «La Medusa» es un hecho histórico auténtico, el hundimiento del barco francés La Medusa, e12 de julio de 1816, después de haber encallado en el «banco de Arguin», frente a la costa africana. Fue un drama terrible, sobre todo porque sólo sobrevivieron quince de los ciento cincuenta náufragos que buscaron refugio en una diabólica balsa, La Machine, que más tarde representaría magistralmente el pintor Théodore Géricault, en su famoso cuadro Le radeu de la Méduse. En un contexto histórico inmediatamente posterior a las guerras napoleónicas, el barco se dirigía a SaintLouis (Senegal) para restituir el gobierno francés en la antigua colonia, que le había sido arrebatada por Inglaterra. Era un contingente expedicionario de carácter civil, científico y militar, integrado por cuatro navíos uno de los cuales era La Medusa, bajo las órdenes del marqués de Chaumereys, un aristócrata incompetente que llevaba veinte años sin pisar la cubierta de un barco. Pero los héroes de esta historia no son capitanes ni oficiales, sino dos de los más humildes tripulantes: el «Rey Nembo», un simple marinero, y Rafaelillo, el grumete de kk la nave, según nos relata con mano firme Carlos Calvera.
Carlos Calvera (Barcelona, 1964) cursa estudios de técnico especialista forestal en Gerona y desde 1985 trabaja en diversos proyectos oficiales relacionados con la gestión de montes y la prevención de incendios forestales.
Sus inquietudes literarias se inician con la colección de relatos 'Historias de monasterios y demonios' (2003). Uno de los cuentos incluidos en este libro resultó premiado en la sexta edición del certamen internacional literario convocado por la Red de Paradores Nacionales del Estado. 'El naufragio de la Medusa' (2005) y ahora 'El Reverso' constituyen sendas incursiones en el género de la novela de acción y abordan, con gran dureza, el drama del hombre atrapado por un destino inexorable.