Homero, el aedo más famoso de la Humanidad, recuerda los avatares de su vida y reflexiona sobre los límites de la propia identidad y sobre el proceso creativo. Sus dos hijas, Circe y Aurora, escuchan el relato... Estamos ante una novela que recrea de forma prodigiosa la vida de Homero contada por él mismo, al tiempo que asistimos a un relato clásico y absolutamente actual. A medida que avanzamos en la lectura de esta novela pasamos las páginas de la vida del autor de la Odisea y la Iliada. Nuestro personaje se construye a partir de la interacción de elementos históricos e imaginarios. En realidad Homero no adopta su «verdadero» nombre hasta bien avanzado el relato. Mientras tanto observamos sus relaciones familiares, sentimentales y profesionales, compartimos sus dudas y depresiones cuando pierde la vista y cuando mueren sus seres queridos, cuando el Estado se apropia de sus bienes materiales y cuando un maestro envidioso pretende arrebatarle la autoría de varios versos de la Iliada... Ficción y realidad se mezclan en este relato que tiene mucho de Historia pero que, al leerlo, nos remite a nuestra propia vida cotidiana. Una autobiografía apócrifa que nos permite disfrutar de uno de nuestros mayores clásicos y nos devuelve a un poeta inmortal a partir de la reconstrucción de un ciego que nació en siete ciudades, hace más de dos mil años, es decir, ayer.