Falta una semana para Navidad, pero no todo el mundo es feliz en el pueblecito de Pine Cove (California). El pequeño Joshua Barker necesita con urgencia un milagro navideño. Y no es que esté moribundo, ni que su perro se haya escapado de casa: es que Josh ha visto cómo a Santa Claus le abrían la cabeza con una pala. Ahora solo anhela una cosa: que el viejo barbudo regrese de entre los muertos. Lo que no puede imaginar es que alguien esté escuchando sus plegarias... Aunque no destaque por ser, precisamente, el más listo de los ángeles. Solo a una mente como la de Christopher Moore se le podría haber ocurrido una historia tan hilarante como esta. Sus novelas se convierten en superventas de The New York Times y se publican en más de una docena de países. El fenómeno de El ángel más tonto del mundo, al que los lectores anglosajones empujaron a las listas de bestsellers de forma progresiva, ha sido comparado con el de El curioso incidente del perro a medianoche, de Mark Haddon.
Christopher Moore es originario de Ohio, aunque en la actualidad vive a caballo entre Hawái y California. Este autor de best sellers, cuyos libros entran a formar parte de inmediato de la lista de los más vendidos de The New York Times, ha publicado doce novelas, y ha vendido los derechos cinematográficos de la mayoría. Entre sus grandes éxitos están La sanguijuela de mi niña, ¡Chúpate esa!, El ángel más tonto del mundo o Cordero, publicadas por La Factoría de Ideas. Su característico humor mordaz y políticamente incorrecto le ha valido comparaciones con escritores satíricos como Swift o Kurt Vonnegut, entre otros.