Convivimos en familia, compartimos horas y horas con nuestos amigos, estudiamos o trabajamos con compañeros, formamos parte de equipos deportivos, militamos en sindicatos o partidos políticos y hay veces, que colaboramos como voluntarios en Organizaciones no gubernamentales... la diversidad de grupos en los que podemos movernos a lo largo de nuestra vida y la posibilidad de compartir con cada uno de ellos; creencias, valores, sentimientos, actitudes, comportamientos, emociones... es infinita. Podemos decir que el grupo es un conjunto de personas interdependientes, cuya interacción social les hace compartir objetivos comunes. La solidez de la cohesión del grupo va creciendo conforme se incrementa el agrado mutuo de los miembros, pero también por lo gratificante que resulta compartir con los demás; ulusiones, problemas o inquietudes, facilitando que los grupos sean más productivos y eficaces si adquieren mutuamente compromisos comunes.