Beijing, una efervescente metrópoli con una energía contagiosa. También es una explosiva mezcla de tradición y modernidad, donde palacios imperiales y templos sublimes conviven con impresionantes edificios modernos y arte de vanguardia, y un paraíso para los amantes de la gastronomía y las compras. Da igual cuáles sean los gustos del viajero, Beijings siempre tiene algo que ofrecerle.
David visitó China por primera vez en 1988, cuando en el país escaseaban los coches y los extranjeros. Tras una temporada trabajando de periodista en Los Ángeles y en su Londres nativo, vivió siete años en Beijing. Sus viajes le han llevado a casi cada una de las provincias del "País del Centro". Es coautor de las últimas tres ediciones de las guías China y Beijing. Hoy vive en Bangkok y colabora con varios periódicos y revistas del Reino Unido.
