«Un relato absorbente que plantea una inquietante pregunta: ¿Cómo es posible que fascistas brutales como Habré, y otros jefes de Estado asesinos, evadan durante tanto tiempo la justicia en los tribunales tras perder el poder?».
Steve Levingston, The Washington Post ¿Qué es necesario para que un dictador responda por sus crímenes? Hissène Habré, expresidente de Chad, atemorizó, torturó y asesinó a una escala aterradora durante sus ocho sangrientos años en el poder. Lo hizo con pleno apoyo de Occidente. Tras ser derrocado, la búsqueda de justicia por parte de las víctimas fue larga y tensa. Este es el dramático relato de la persecución de Habré y de su histórico juicio. Narrado en primera persona por el abogado experto en crímenes de guerra Reed Brody, conocido como «El cazador de dictadores», reconstruye cómo él y un equipo internacional de investigadores, asesores legales y las propias víctimas trabajaron coordinados en tres continentes para desenterrar pruebas y encontrar testigos, presentar peticiones ante tribunales y gobiernos escépticos, y movilizar la opinión pública. Enfrentaron numerosos obstáculos y constantes amenazas, pero nunca desfallecieron. Con lecciones aplicables a la impugnación de las agresiones en Ucrania y Gaza, esta crónica vibrante nos demuestra que la impunidad que a menudo protege a los poderosos no es inevitable y que incluso los peores tiranos pueden ser llevados ante la justicia.
REED BRODY (Brooklyn, 1953) es abogado y ha dedicado su vida a la defensa de los derechos humanos. Trabajó veinticinco años con las víctimas del antiguo déspota del Chad, Hissène Habré, condenado en Senegal por crímenes de lesa humanidad, y en los casos de Augusto Pinochet (Chile), Jean-Claude Duvalier (Haití) y Yahya Jammeh (Gambia). Es autor de cuatro informes publicados por Human Rights Watch sobre la tortura de los musulmanes detenidos por la Administración George W. Bush. En 1985, sacó a la luz las atrocidades cometidas por los «contras» respaldados por Estados Unidos en Nicaragua y, desde 2024, es integrante de una comisión de Naciones Unidas que investiga los abusos en este país centroamericano. También ha dirigido misiones de la ONU en El Salvador y el Congo.