ALAN MOORE
ÁNGELES FÓSILES es un texto que nació maldito. Fue escrito en diciembre de 2002. Inicialmente, estaba previsto que apareciera en el número 15 de Kaos, una publicación especializada en ocultismo dirigida por Joel Biroco, amigo personal de Moore. Lamentablemente, Kaos dejó de publicarse y ÁNGELES FÓSILES permaneció en el silencio. Tiempo después, cuando comenzó a difundirse en revistas underground vinculadas al mundo mágico, el arte oscuro o el ocultismo, adquirió el estatus de obra de culto, inusitadamente honesta e incluso despiadada; sus destinatarios eran las legiones de seguidores de los cultos ocultistas contemporáneos y los fans, que ya se contaban por miles, del propio Moore, quien quiso dar un valiente paso hacia adelante en su defensa de lo que entendía por magia liberadora y trascendental, vislumbrando y apuntando un futuro para él y los suyos donde la magia se fundiría con el arte. Durante estos años, ÁNGELES FÓSILES ha ido ganando un lugar en la obra de Moore, aportando luz a su posicionamiento actual (anárquico, flexible y enfrentado a la industria del cómic) y abriendo el camino para tantos otros que ven en su obra un eterno faro.
Guionista de cómics británico y con fama de pintoresco, Moore es uno de los motores creativos más importantes de la historia de los cómics. Sus innovadores trabajos, V de Vendetta, Watchmen, La Liga de los Hombre Extraordinarios o From Hell, se han convertido en piezas imperecederas del paisaje cultural contemporáneo. El autor es ganador de más premios y reconocimientos de los que pueden contarse. Sus argumentos han inspirado el guión de varias películas de la factoría Hollywood.Las siguientes declaraciones resumen su opinón sobre su trabajo: creo que la magia es arte, y que el arte ?ya sea música, escritura, escultura o se presente bajo cualquier otra forma? supone, literalmente, magia. El arte es, como la magia, la ciencia de manipular símbolos, palabras o imágenes para generar cambios en la conciencia? de hecho, realizar un hechizo consiste precisamente en jugar con las letras, en manipular las palabras, para así alterar la conciencia de la gente, y por eso creo que un artista o un escritor es lo más parecido, en la actualidad, a un chamán.