Los recientes acontecimientos hablan por sí solos. Basta acercarse a las primeras páginas de los periódicos para comprender que algo sucede con la seguridad en general, y con los asaltos a domicilios en particular. Detrás de todo esto hay una gran desinformación por parte de los ciudadanos: ¿qué debo hacer para prevenir una posible intrusión en mi domicilio?, ¿cuántos tipos de puertas hay, y entre todas cuál es la más adecuada a mis necesidades o las particularidades de mi domicilio?, ¿Cómo me protege la ley?, ¿qué debo valorar si decido contratar un servicio de seguridad privado? Este libro da respuesta a estas preguntas y a muchas más.
