El presente libro toma como punto de partida la afirmación del amor a Dios atribuida a San Agustín «te amo, quiero que seas» para examinar la conexión entre la fe y el amor de un modo accesible para la audiencia tanto creyente como laica.
Catedrático de la Facultad de Letras de la Universidad Carolina de Praga, es filósofo, sociólogo y teólogo católico. Natural de Checoslovaquia, Halík fue expulsado de la enseñanza universitaria durante el período comunista. Tras la caída del comunismo, sirvió como consejero del presidente checo Václav Havel y como secretario general de la Conferencia Episcopal Checa. En 1992, Juan Pablo II lo nombró consejero del Pontificio Consejo para el Diálogo con los No Creyentes y, en 2009, Benedicto XVI le concedió el título de "monseñor". En 2014, recibió el Premio Templeton por sus excepcionales contribuciones para el desarrollo de la dimensión espiritual de la vida.