En verano de 1993, un grupo de oficiales del Ejército español, entre los que se encuentra el comandante de Infantería Fernando Mollá, aterriza en Zagreb para integrarse en el equipo de Observaciones Militares al servicio de la ONU. Durante un año lleno de experiencias de inmensa carga humana, Fernando Mollá, militar sin armas en medio de la guerra, vive los avatares del conflicto. Compartiendo los terribles y macabros afectos de bombardeos, secuestros, asesinatos y carencias de casi todo, el comandante Mollá sufre el dolor de todas las víctimas al lado de los desvalidos, de los niños, mujeres, y ancianos que le miran en silencio muchas veces, expresando con sus ojos secos, unos anhelos y unas necesidades que rompen las entrañas de cada corazón que se asoma a aquellos Balcanes, que se desangran por las venas de todas las repúblicas, que un día aglutinara el marical Tito bajo su mando y control .
