JULIÁN CASANOVA / ÁNGELA CENARRO
Cuando se habla de la represión
franquista, pensamos sobre todo en
cárceles y ejecuciones. Pero hubo,
además, una represión económica
que afectó a muchos y que tuvo graves
consecuencias. Comenzó en forma
de pillaje y rapiña, que se legalizó
en enero de 1937 con las comisiones
de incautación, y prosiguió
después del fi n de las hostilidades.
Julián Casanova es catedrático de Historia Contemporánea en la Universidad de Zaragoza. Autor, entre otros trabajos, de Anarquismo y revolución en la sociedad rural aragonesa, 1936-1938 (1985