Doce (en realidad trece) contundentes golpes de pura narrativa lanzados a corta distancia y con plena eficacia. Una pareja de vitelloni al más puro estilo Fellini, el punto de vista del zombi, un sainete xenófobo en un tren de cercanías, otra variante de cuento de fantasmas, unos peculiares extras al servicio de Hitchcock, Internet como amargo fedatario de los avatares de la vida, el actor porno que entregó su alma a Marilyn Monroe, la amputación como obra de arte o un peculiar pacto con el diablo. Resulta sorprendente en Lo breve si breve (cuentos sobre películas cortas), que aunque en todos los relatos los cortometrajes ocupan un lugar importante en los argumentos o tramas, ninguno se parece entre sí, ni siquiera en el género, y ofrecen una rica variedad debida a la mirada genuina y particular de cada uno de los autores. Impresiona verdaderamente, la nómina de escritores que aceptaron el juego propuesto: Pedro Ugarte, José Luis Muñoz, Manuel Hidalgo, Fernando Marías, Alfonso MateoSagasta, David Torres, Miguel González San Martín, Marta Rivera de la Cruz, Elia Barceló, Andreu Martín, Gustavo Martín Garzo, José Carlos Somoza.