El hogar de los príncipes Priklonski está al borde de la ruina. La princesa madre asiste al desatre, incapaz de controlar a su hijo Yegórushka, un húsar retirado, vago y frívolo que pasa los días borracho, recorriendo prostíbulos y casas de juego donde malgasta el escaso patrimonio familiar. Su hermana Marusia, delicada «como las heroínas de las novelas inglesas», solo aspira a que alguien la ame y le ofrezca una nueva vida. Y ese alguien bien podría ser el doctor Toporkov, antiguo criado de la familia, que ahora goza de una buena posición gracias a su consultorio médico. En Flores tardías Antón Chéjov indaga en la decadencia de la aristocracia rusa y la aparición de una nueva burguesía, sin tomar partido por ninguna de las dos partes. Un reflejo social donde no siempre los mejores son los que logran alcanzar la felicidad.
Antón Pávlovich Chéjov (Taganrog, 1860 - Badenweiler, 1904). Narrador y dramaturgo ruso. Considerado el representante más destacado de la escuela realista en su país, su obra es una de las más importantes de la dramaturgia y la narrativa de la literatura universal. Su estilo está marcado por una austeridad expresiva así como por la ausencia de tramas complejas. Chéjov se apartó decididamente de la finalidad moral presente en la estructura de las obras tradicionales. Además, no le preocupaban las dificultades que esto planteaba al lector, porque consideraba que el papel del artista es realizar preguntas, no responderlas. Utilizando temas de la vida cotidiana, Chéjov retrató el estado del alma de la sociedad rusa anterior a la revolución de 1905, mostrando la falta de comunicación y el tedio que reinaba en aquella época.