Este es un libro escrito desde la experiencia y la observación, y adobado con algunas reflexiones, que está teñido de la filosofía que he predicado durante toda mi vida laboral y directiva: la necesidad de desarrollar y formar a todas aquellas personas que tienen responsabilidades sobre otras personas. es decir, a los llamados jefes. Estas páginas no son más que una reflexión amable sobre los jefes, llámense como se llamen, directivos, mandos o supervisores. Cada uno de los capítulos que siguen son una meditación sobre todas aquellas personas que tienen subordinados, que no súbditos (aunque muchos jefes lo preferirían), y encierran el sincero propósito de ayudar a comprender, con el necesario contraste de pareceres y de ideas, cuál es el papel de los jefes y por dónde se atisba el porvenir