? Marianne Williamson es una de las voces espirituales más aclamadas de nuestro tiempo.
? La autora expone el sufrimiento desde una nueva perspectiva: la de comprender qué enseñanzas viene a dejarnos.
? Evitando hacer frente al sufrimiento, estamos renunciando al trabajo espiritual de sanación que nos ofrece.
Marianne Williamson, autora superventas y una de las voces más reconocidas del movimiento espiritual, dedica su nueva obra a un tema acuciante: la tristeza y la depresión. Como individuos y como sociedad, tendemos a buscar un estado de felicidad perpetua: huimos del dolor, lo ahogamos en posesiones, nos medicamos cuando todo lo demás no funciona. Sin embargo, afirma Marianne Williamson, pocas depresiones responden a causas médicas. Tal como afirmaba Buda, el sufrimiento es una cuestión de índole espiritual.
Las tradiciones espirituales e incluso la psicoterapia así lo confirman: el dolor y la tristeza señalan el camino de la transformación. La paz interior solo se puede alcanzar cuando aceptamos el sufrimiento y asumimos lo que pretende enseñarnos. Lejos de banalizar los estados depresivos, esta obra nos acompaña en el proceso, a menudo doloroso, que lleva del sufrimiento a la iluminación y nos ofrece las herramientas de la meditación, la oración y el perdón para alcanzar una consciencia profunda de los sentimientos, la vida y el auténtico ser.
Marianne Williamson es una de las autoras más influyentes en espiritualidad contemporánea. Siete de sus libros han sido bestsellers del New York Times. Es una de las voces públicas más reconocidas en Estados Unidos, con apariciones en programas como Oprah, Larry King Live y Good Morning America. Conferenciante internacional y activista social, combina mística, psicología y conciencia espiritual en un mensaje profundamente transformador.
Nativa de Houston, Texas, en 1989 fundó Project Angel Food, un programa de comidas a domicilio que ha servido más de 11 millones de comidas a personas con SIDA en la zona de Los Ángeles. Además, cofundó The Peace Alliance y ha dedicado su carrera a la justicia social y la conciencia espiritual.