Este pato tiene una peculiaridad única: ¡nunca parpadea! Mientras todos parpadeamos sin darnos cuenta, él parece estar hipnotizado. Página tras página, la espera se convierte en un juego cómico en el que intentar hacer que el pato parpadee de cualquier manera.
Descubre una historia en la que la paciencia y la perseverancia se enfrentan a la inmutable mirada de un pato que, por mucho que le presionen, simplemente no parpadea.
¡No le quites el ojo!
Vivo en Ciudad del Cabo y me gusta pasar el tiempo en el mar o en las montañas que hay sobre mi casa. Me encanta hacer libros ilustrados y escribir novelas, y siempre estoy trabajando en (al menos) uno de cada.