KURATA, HYAKUZO
Tres monjes budistas caminan dificultosamente bajo una tormenta de nieve. Es de noche. Una débil luz, a lo lejos, anuncia la posibilidad inesperada de un refugio donde calentarse y reponer fuerzas. Así comienza este viaje iniciático que es, en el fondo, una parábola del encuentro y la amistad, de los deseos ocultos y el egoísmo, de la generosidad y la entrega de la vida.
Bajo el ropaje de una obra de teatro, la trama avanza con la distancia y la intensidad que imprime la perspectiva zen. Sin apenas darse cuenta, el lector es invitado a convertirse en discípulo que observa los pequeños gestos y las escasas palabras del maestro Shinran para adentrarse en la Verdera Tierra Pura, donde la plegaria insistente del «Nembutsu» es el único requisito para alcanzar la salvación.
En la peregrinación del ser humano sobre la tierra, la confiada recitación del nombre santo de Amida porta como regalo la serenidad, la salud y la comunión pacificada con todas las criaturas.
Hyakuzo Kurata (1891-1943) fue un dramaturgo de éxito y un reconocido ensayista en la primera mitad del siglo XX.
Hyakuzo Kurata nació en 1891 en una aldea de la prefectura de Hiroshima. Era el hijo primogénito de una familia de comerciantes. Estudio en la que más tarde sería la Universidad de Tokio, pero la débil salud y las circunstancias familiares le impidieron dedicarse a la docencia. Murió en Tokio en 1943, cuando apenas contaba 51 años. Sus obras, que cosecharon un gran éxito entre personas de distinta edad y condición social, están muy influidas por la espiritualidad zen y por la Biblia. Destaca, en primer lugar, «El monje y sus discípulos» (1916), y más tarde su colección de ensayos «El principio del amor y el entendimiento» (1921).