El banquero anarquista atrae por el carácter de sátira que contiene. En él se desata el humor como la puesta en evidencia de la literalidad. Las cosas desnudas, sin cáscara ni máscara, mueven a la risa. Porque la risa ablanda la desnudez cruda de las cosas. Y esta sonrisa irónica y finalmente mordaz que nos llega inmersos en la lectura de este libro, analiza un mundo gobernado por dos convenciones gigantescas: la política y la economía, y mediante un diálogo casi platónico, revela el hueso limpio de carne de estas dos bases del sistema de cualquier sociedad actual. La economía se jacta de haberse apropiado totalmente de uno de los sueños más puros que haya creado nunca la ideología. Hace suyo el vestido del anarquismo y lo razona hasta desasirlo de su carácter ideológico. El banquero naturaliza la economía y la convierte en algo inevitable. Y no sólo eso, aprisiona en su celda lógica a la ideología y a la política que así se quedan sin respiraderos para influir en la sociedad. Pero cuando el dinero y la economía destruyen mediante un discurso lógico los razonamientos ideológicos, el mono se ríe encima de la rama y vuelve a la selva.
Fernando Pessoa nació en Lisboa el 13 de
junio de 1888. Su madre, prematuramente
viuda, se casó en segundas nupcias con el
comandante João Miguel Rosa, que en 1895
fue nombrado cónsul en Durban
(Sudáfrica), donde Pessoa estudió en el
convento de West Street y luego en la High
School y la Commercial School, y pasó el
examen de admisión y la Intermediate
Examination de Artes en la Universidad de
Ciudad del Cabo. En 1905, Pessoa se
trasladó a Lisboa para matricularse en el
curso superior de Letras. Traductor,
astrólogo, médium, ensayista, vinculado a la
vez a la vanguardia literaria y plástica y al
ocultismo, Fernando Pessoa debe su extensa
y casi enteramente póstuma notoriedad
mundial a la vasta y variada obra poética
que, firmada por él mismo o atribuida a
alguno de sus heterónimos -señaladamente
Alberto Caeiro, Ricardo Reis y Alvaro de
Campos- , se difundió sobre todo a partir de
su fallecimiento en Lisboa el 30 de
noviembre de 1935.