Las ideas desarrolladas en este ensayo giran en torno a una temática crucial de la década de los ochenta: el problema del paro, y en general de las crisis sociológicas de la sociedad industrial avanzada, en tanto que problema filosófico, es decir, de valores. En efecto, en las postrimerías del siglo xx han surgido dos contradicciones en las sociedades industriales avanzadas, una económica: pretender automatizar y mantener el pleno empleo, y otra cultural: educar a los jóvenes de la sociedad opulenta en la moral puritana. La primera produce la crisis del paro; la segunda, el pasotismo. Ambas crisis son debidas al desfase entre el nivel tecnológico de los países nórdicos y la mentalidad laboralista que aún los dirige. Según el autor, cuando Unamuno dijo «¡que inventen ellos!» tenía seguramente más razón de la que supusieron sus contemporáneos: los nórdicos sirven para inventar y producir, son expertos en medios pero infantiles en los fines; ahora que ya se ha producido, son los mediterráneos, expertos en fines, quienes deben organizar la vida para disfrutar la abundancia. Cómo hacerlo es el tema de este libro.
Luis Racionero cursó la carrera de Ingeniería Industrial en Barcelona (1965), donde se licenció también en Ciencias Económicas. Fue profesor de Microeconomía en la Facultad de Ciencias Económicas en 1966. En 1967 obtuvo la beca Fullbright para doctorarse en Urbanismo en Berkeley (California). Ha sido profesor de Urbanismo en la Escuela de Arquitectura de Barcelona y en la Facultad de Económicas. En 1994 fue by-fellow en el Churchill College de Cambridge. Actualmente desempeña el cargo de director del Colegio de España en París. Es autor, entre otros libros, de los ensayos Filosofías del underground (1977) y Del paro al ocio (1983), Premio Anagrama de Ensayo, Los ángeles cuánticos (1987), Arte y ciencia (1988), Florencia de los Médicis (1990), Atenas de Pericles (1993), Oriente y Occidente (1993), El arte de escribir (1994) y El genio del lugar (1997). Su novela Cercamon obtuvo el Premi Prudenci Bertrana en 1981. Otras novelas suyas son La forja del exilio (1985) y Raimundo o la alquimia de la locura (1986). En 1996 obtuvo el Premio Azorín con su novela La cárcel del amor.