RAMÍREZ, SERGIO
Las anotaciones diarias de mi bitácora, que lanzo todos los días dentro de la botella, son una escritura compartida, una experiencia que no se parece a ninguna otra de mi vida de escritor. En este nuevo espacio que creo cada vez bajo mis dedos, las viejas teclas haciendo su oficio de siempre, la palabra sin consecuencias deja de existir, y entra en un nuevo espacio dialéctico donde toda frase gana la posibilidad de tener una respuesta y cada afirmación puede ser de inmediato desafiada, y por tanto, la palabra viene a situarse en ese territorio dichosamente precario en el que quien escribe puede ser corregido en sus juicios, puede enmendar sus opiniones, o refutar a quienes le refutan. Voltaire hubiera estado encantado con semejante posibilidad de generar un espacio crítico múltiple semejante, que es lo que es el blog para mí. La botella que se va en la corriente ignorada llevando el mensaje, y puede regresar a mis manos. SERGIO RAMÍREZ
Sergio Ramírez, ganador del Premio Alfaguara de Novela con Margarita, está linda la mar en 1998, nació en Masatepe, Nicaragua, en 1942. Es parte de la generación de escritores latinoamericanos que surgió después del boom, y tras un largo exilio voluntario en Costa Rica y Alemania abandonó por un tiempo su carrera literaria para incorporarse a la revolución sandinista que derrocó a la dictadura del último Somoza. Reemprendió la escritura con la novela Castigo divino (1988), que obtuvo el Premio Dashiel Hammet en España, y la siguiente, Un baile de máscaras, ganó el Premio Laure Bataillon a la mejor novela extranjera aparecida en Francia en 1998. Alfaguara ha publicado también sus Cuentos completos, con un prólogo de Mario Benedetti (1998)