¿Qué crea a un asesino múltiple? ¿A qué se debe su proliferación en nuestras sociedades modernas? No han faltado explicaciones de este fenómeno que crea pánico y se vive como amenaza: se ha hablado de taras biológicas, de peculiaridades genéticas, de cocientes de inteligencia. se han rastreado malos tratos en la infancia, familias disfuncionales y condicionamientos para la agresividad. los psiquiatras han trazado cuadros psicopatológicos y los detectives, perfiles. y la literatura y los medios han añadido un equívoco elemento inhumano, monstruoso pero seductor. Para el antropólogo Elliott Leyton, muchas de estas explicaciones merecen ser revisadas, cuando no completamente refutadas. Con escepticismo y rigor científico, Cazadores de humanos desmonta la mayoría de los mitos construidos sobre los asesinos múltiples, devolviéndolos a la cultura a la que pertenecen y estableciendo las constantes venganza, extorsión, celebridad, desahogo sexual y creación de una identidad de sus motivaciones y propósitos. Para Leyton sus crímenes tienen siempre un significado social, incluso «subpolítico», como argumenta en el análisis de seis famosos casos entre ellos, el Estrangulador de Boston, Ted Bundy y la pareja inspiradora de Malas tierras y Asesinos natos, Charles Starkweather y Caril Fugate reconstruidos con detalle y penetración a partir de las propias declaraciones de los asesinos.