Diseñar parques inclusivos es el punto de partida que garantiza que todos los niños y las niñas, con independencia de sus capacidades, puedan disfrutar de su derecho a juJugar es un derecho fundamental de la infancia, con independencia de su condicióno diversidad, según la Declaración de los Derechos del Niño (ONU, 1959). Tal como se apunta en el prólogo de esta obra, el garantizar este derecho al juego es un deber, ya que es un componente importante para las niñas y los niños en su desarrollo, que estimula la creatividad, fomenta la sociabilización, promueve la autonomía y motiva a esforzarse y a asumir retos. En Arquitectura del juego, estímulo sensorial y cognitivo desde la infancia hasta la adolescencia, la arquitecta Berta Brusilovsky presenta, desde la accesibilidad, la neurocienciay la salud, su modelo de accesibilidad cognitiva y recreación en parques, plazas, jardines y áreas libres urbanas, ofreciendo orientación e inspiración para respaldar un modelo de parque infantil inclusivo al aire libre, en especial, para tantas personas que precisan estímulos sensoriales y cognitivos. El objetivo no puede ser más importante y atractivo, reunir y agrupar a colectivos diversos en el juego y la recreación: conseguir que estas áreas sean atractivas y utilizadaspor quienes quieran formar parte de esta actividad. La diversidad como conocimiento,aprendizaje y diversión tendría verdadero impacto en el urbanismo, la forma, la distribución y las dimensiones necesarias para hacer, realmente, parques inclusivos.
Berta Brusilovsky Filer es arquitecta, urbanista, máster en accesibilidad universal y diseño para todos. Especialista en el espectro cognitivo. Desde hace más de una década trabaja en un modelo para diseñar espacios accesibles espectro cognitivo y una metodología participativa que incluye a técnicos y personas con diversos modos cognitivos en las evaluaciones. (Modelo para diseñar espacios accesibles. Espectro cognitivo, publicado por La Ciudad Accesible). Este modelo se ha convertido en los últimos años en un sistema espacial de apoyos cuya idoneidad en entornos y edificios se puede verificar mediante un Índice de accesibilidad cognitiva sistematizado en 20 indicadores (Índice de accesibilidad cognitiva. Consideraciones para el diseño, publicado por Entinema, 2018). En la actualidad, y ampliando el espectro de grupos y modos cognitivos, sus investigaciones y práctica profesional se sustenta en aspectos sensoriales, de percepción, de cognición y motores de las personas: funciones neurológicas del ser humano cuyo conocimiento resulta fundamental para diseñar entornos y edificios comprensibles y accesibles para todas las personas (Seguridad espacial cognitiva. Arquitectura: cerebro y mente, publicado en formato epub por Entinema, 2020).
